martes, 29 de octubre de 2013

Joyita del Internet

Este particular roedor es capaz de entregar una cantidad de dinero solo con chasquear sus dedos lo cual lo hace realmente interesante, propaganda de un nuevo sistema de prestamos en Perú, aqui les dejo el video espero que lo disfruten


MAS VIDEOS ASI VISITA https://www.youtube.com/user/GamesMacabreMental













Historia de Pandaria - HISTORY OF PANDARIA

Envuelto en niebla desde que el mundo se desgajase hace más de diez mil años, el antiguo reino de Pandaria ha permanecido ajeno a los trastornos de la guerra. Sus exuberantes bosques y montañas envueltas en nubes son el hogar de un complejo ecosistema de razas indígenas y criaturas exóticas. Se trata del hogar de los enigmáticos pandaren, una raza que disfruta de la vida al máximo incluso cuando se encuentra bajo el asedio de una antigua amenaza.
El nuevo continente hace acto de presencia en un mundo ajado justo cuando la Alianza y la Horda se encuentran en plena espiral descendente hacia una guerra que devorará Azeroth por completo. ¿Se despejará la niebla de Pandaria para revelar la salvación del mundo? ¿O la batalla por controlar esta nueva tierra rica y emocionante empujará a las dos poderosas facciones hacia el precipicio de la guerra y la aniquilación total.
Pandaria es el hogar de los pandaren y el lugar de nacimiento de su ancestral imperio. Localizado en la parte sur de Azeroth, Pandaria fue oculta bajo una mágica bruma por su último Emperador, hace 10.000 años aproximadamente y por lo tanto desapareció en el mito y la leyenda. Sólo aquellos pandaren que dejaron su tierra natal en las espaldas de la gigantesca tortuga Shen-zin Su incluyendo los muy conocidos maestros cerveceros, han sido vistos fuera de su hogar. Incluso algunos proporcionaron ayuda a otras razas en la Tercera Guerra.
Tras la Devastación, la magia que mantuvo oculta a Pandaria desde el Gran Cataclismo se disipó y los pandaren emergieron de los bosques de bambú de sus ancestros para mostrar al mundo su estilo único de batalla (y poderosas cervezas) al resto de Azeroth.
Este continente al fin podrá ser accesible con la nueva expansión de World of Warcraft:

Historia

Rodeados de mitos y leyendas, rara vez se les ve y menos aún se les entiende, los enigmáticos Pandaren son un misterio para las demás razas de Azeroth. La noble historia del pueblo Pandaren data de miles de años, incluso antes de los imperios del hombre y del hendimiento del mundo.
Habitantes de una tierra fértil y maravillosa, los Pandaren alguna vez sufrieron la opresión de una monstruosa raza de ancestrales señores de guerra conocidos como los Mogu. Por medio de tenacidad, diplomacia y una forma única de combate sin armas, los Pandaren llevaron a cabo una revolución que sirvió para derrocar a los Mogu y establecer así el imperio Pandaren que prosperaría por miles de años.
En los oscuros días que siguieron al hendimiento del mundo, cuando los demonios entraron a Azeroth y pusieron a la totalidad del mundo mortal en peligro, el último emperador de los Pandaren descubrió una manera de proteger sus tierras de la devastación. Su trato con el destino ocultó su tierra con una bruma impenetrable durante diez mil años; pero la naturaleza de su transacción dejó a Pandaria embrujada desde entonces...



Cómo llegar

Los jugadores podrán acceder a Pandaria mediante nuevas misiones disponibles en Orgrimmar y Ventormenta. Éstas son cortas y fáciles para que los aventureros lleguen al nuevo continente lo más rápido posible. Inicialmente, los aventureros cruzaban y atravesaban las brumas mediante naves de guerra estacionadas en las capitales al nivel 85. No habrá formas convencionales de acceder a Pandaria como barcos o zepelines, sino que se enlazará al resto del mundo a través de portales que llevarán al Bosque de Jade, y que pueden ser creados por un mago o bien accesibles en los emplazamientos que los pandaren han establecido en Ventormenta y Orgrimmar.

Zona de Pandaria y Leveo

    Bosque de Jade (85 - 86)
    Valle de los Cuatro Vientos (86 - 88)
    Espesura Krasarang (86-88)
    Cima Kun-Lai (87-89)
    Estepas de Tong Long (89-90)
    Desierto del Pavor (89-90)
    Escalera Velada (90)
    Valle de la Flor Eterna (90)
    Isla del Trueno (90)

jueves, 24 de octubre de 2013

Thrall el ascenso del Jefe de Guerra



Thrall es hijo de Durotan, antiguo Jefe del clan Frostwolf y de Draka. Cuando era sólo un bebé fue encontrado por Aedelas Blackmoore junto a los cadáveres de sus padres. El por entonces comandante encargado de capturar a los orcos errantes que quedaban tras el fin de la Segunda Guerra le dio el nombre de Thrall que es otra forma de decir 'esclavo' en la lengua humana. Blackmoore se lo llevó a Durnholde Keep, su fortaleza donde creció como un gran gladiador, mezclando la fiereza de un orco con la estrategia e inteligencia de un humano. Durante su entrenamiento recibió abundantes golpes y palizas, pero fue atendido por una humana llamada Clannia y creció con su hija Taretha. Thrall demostró que además de un gran luchador, de también era un excelente estudiante. Sin embargo los abundantes golpes que recibía de Aedelas Blackmoore, tanto dentro como fuera de su instrucción de guerrero, empezaron a pasar factura. En las cartas que secretamente se escribían Thrall y Taretha, el orco le confesó a la humana que deseaba escapar de allí y ganar su libertad. Taretha decidió ayudarlo y creó una distracción en el interior de la fortaleza de Durnholde para que Thrall escapara. Cuando más tarde se encontraron en una cueva cercana, Taretha le proporcionó comida y provisiones. Tras esto, Thrall abandonó Durnholde prometiendo no volver jamás. 


 Lamentablemente, Thrall fue capturado e ingresó en un campo de internamiento para orcos liderado por Lorin Remka. Allí conoció a un anciano orco llamado Kelgar, que le habló de la corrupción de Gul'dan y de cómo los viejos caminos habrían resultado mejores para la Horda. También le habló de Grom Hellscream, líder del Clan Warsong, que pensaba de la misma manera. Cuando otro orco dijo a Thrall que Blackmoore había llegado al campamento buscándolo, Thrall escapó de nuevo, y fue a buscar a Grom Hellscream.

Después de encontrar a su hermano Grom, este lo acogió y le enseñó el idioma orco. Al comprobar el manto que envolvía a Thrall cuando fue encontrado, Grom le dijo que provenía de orcos exiliados del clan Clan Frostwolf. Después de pasar algún tiempo con Hellscream, Thrall decidió marcharse por un tiempo, con el fin de buscar sus raíces en las Montañas de Alterac. Allí fue rescatado por el clan Frostwolf tras quedar exhausto por el largo viaje que había realizado. Ya en su campamento, Thrall conoció a Drek'Thar, quien dijo que era hijo de Durotan, el antiguo Jefe del clan.

Después de haber encontrado por fin su lugar, Drek'Thar enseñó a Thrall los antiguos caminos de la Horda, antes de la corrupción de Gul'dan, y así Thrall fue aceptado como uno más del clan. Un lobo gélido llamado Snowsong, se unió a Thrall como acompañante. No pasó mucho tiempo hasta que Drek'thar lo llamó para estar los dos a solas en un lugar apartado que Thrall nunca había visto antes. Allí se iba a producir su iniciación. En una de las experiencias más espirituales de su vida, Thrall contactó con los espíritus de la Tierra, Aire, Fuego, Agua y lo Salvaje, convirtiéndose en el primer chamán orco de la Horda desde que Gul'dan se corrompió. Cuando regresó al campamento se había convertido en un orco nuevo, de los pocos que habían descubierto y comprendido los orígenes de su gente lo que le facilitaría su labor como nuevo Jefe de su clan. Fue un evento simbólico y significativo, ya que el hecho de ser aceptado por los espíritus significaba también que estos perdonaban a los orcos por sus devaneos con los poderes demoníacos en el pasado. Thrall se había convertido en el primero de una nueva generación de orcos. 

Un extraño forastero llegó entonces al campamento. Thrall lo recibió cordialmente, pero se enfadó cuando el extranjero acusó al clan Frostwolf de esconderse en las montañas. El forastero dijo algunas cosas que hirieron y enfurecieron a Thrall faltando al respeto a su amigo Grom Hellscream por lo que se produjo un duelo entre ambos. El extraño descubrió bajo su capa una pesada armadura negra y un enorme martillo pero Thrall consiguió desarmarlo. Fue entonces cuando ese estraño reveló su identidad como Orgrim Doomhammer, el Jefe de Guerra de la Horda. 

Doomhammer había contactado con Drek'Thar tras enterarse del retorno del hijo de Durotan y decidió provocar una pelea para ver si el rumor era cierto y merecía la pena. Thrall no sólo fue capaz de desafiar a Doomhammer, sino también de vencerlo, algo que nadie, excepto su padre Durotan, había conseguido nunca.

Doomhammer nombró a Thrall segundo al mando y le explico sus planes para liberar a los orcos: Thrall debería infiltrarse en los campamento como uno más de los prisioneros y una vez dentro, despertar el poder de los orcos con sus poderes chamanísticos. Los revitalizados prisioneros no tardarían en tomar el campamento. Ese plan funcionó en los primeros cuatro emplazamientos. En el quinto, que hoy forma lo que se conoce como Hammerfall en Arathi, los humanos estaban sobreavisados y se habían preparado con un regimiento de caballeros de Durnholde, de manera que había una mayor resistencia. En una sangrienta y cruel lucha, Orgrim Doomhammer fue asesinado empalado por la espalda por la lanza de un caballero.

Lor'themar Theron es el Señor Regente de Quel'Thalas



"Lo único que podemos hacer es recorrer el camino que se nos da con toda dignidad que podamos reunir, cada uno con nuestra propia gloria o muerte, y rezar para que siga siendo algo de nuestro propio corazón cuando todo está dicho y hecho. De la Fuente del Sol, espero que siga existiendo algo mío."

Lor'themar Theron es el Señor Regente de Quel'Thalas, y fue el líder de los elfos de sangre de Azeroth en ausencia del Príncipe Kael'thas Caminante del Sol. Después de la traición y posterior muerte del Príncipe, Lor'themar se ha convertido en el único líder de su pueblo. El que una vez fue el segundo al mando de la General Forestal Sylvanas Brisaveloz, asumió el liderazgo temporal de los elfos nobles después del ataque de La Plaga, un papel que podría allanar el camino para su regencia tras el regreso del príncipe.



Tras sobrevivir a la brutal invasión de La Plaga en Quel’Thalas, se le confió la salvaguardia del reino elfo durante la estancia del príncipe Kael’thas en Terrallende. Poco después, la voluntad del Lor’themar fue puesta a prueba cuando el Príncipe, corrompido por las energías demoníacas, regresó a Azeroth e intentó usar La Fuente del Sol con propósitos funestos. Kael’thas fue posteriormente asesinado por su traición, dejando a Lor’themar al frente del destino de los elfos de sangre. Con el renacimiento de La Fuente del Sol, un brillante futuro se extiende ante Quel’Thalas.
Será Lor’themar, quien sobrevivió a muchos de los días más oscuros del reino, el que guíe de forma adecuada a su gente hacia su nuevo destino. Con la creciente paranoia de Garrosh Grito Infernal y su falta de escrúpulos, el Regente se ha alineado con el creciente movimiento que pretende derrocar al dictatorial Jefe de Guerra, así comanda las fuerzas de la Horda en una batalla contra los mayores enemigos.

En la Segunda Guerra, Lor'themar era el segundo al mando de Sylvanas Brisaveloz, la General Forestal de Lunargenta. Lor'themar, un forestal altamente cualificado, se unió a sus hermanos en la batalla contra las fuerzas de la invasión de la Antigua Horda después que el Rey Anasterian Caminante del Sol decidiese eliminar a los Amani de una vez por todas. Con su armadura recubierta de la sangre de sus enemigos, se reunió con Alleria y Turalyon un poco antes de la invasión aérea por los Faucedraco y sus dragones rojos.

Logró escapar con sus forestales del infierno causado por los desenfrenados dragones rojos, a pesar de que no pudieron extinguir las para salvar a su pueblo. Rápidamente, él y Turalyon llegaron a considerarse como iguales y fueron capaces de convencer a Alleria de que la retirada era la única opción. Entonces, Lor'themar acompañó a Khadgar, a Turalyon, a Alleria y a Kurdran a Ciudad Capital. La capital estaba sitiada por Orgrim Martillo Maldito, aunque éste abandonó rápidamente esta batalla al enterarse de la traición a manos de su jefe brujo, Gul'dan.

Quel'Thalas habían sido protegida por el poder de la Fuente del Sol, que había rechazado el ataque de los dragones rojos. A pesar de esto, el Rey Anasterian abandonó la Alianza de Lordaeron después de la Segunda Guerra, citando la falta de liderazgo de los humanos que llevó a la violencia innecesaria en la tierra élfica. Lor'themar, y la nación de los elfos nobles, volvieron a aislarse de las razas jóvenes
 
Muchos años más tarde, tras el aislamiento de Quel'Thalas de la Alianza, Lor'themar se había convertido en el comandante de los Errantes - en concreto, velaba por la Fuente del Sol y salvaguardaba de los que, a su vez, velaba por Quel'Thalas. Durante este tiempo, se hizo amigo de Dar'Khan Drathirω , un miembro desilusionado del Concilio de Lunargenta, anhelaba el reconocimiento que sentía que él nunca recibió.
 
Lor'themar luchando hacia la Fuente del Sol durante la invasión de la Plaga de Quel'Thalas.
Dar'Khan utilizó su amistad para conseguir información exclusiva de las defensas de Quel'Thalas - e informó al caballero de la muerte y heredero de Lordaeron, al malvado Príncipe Arthas (a quien Dar'Khan había vendido su lealtad), de cómo evitarlos. Arthas y sus legiones de no-muertos asediaron Lunargenta, y a pesar de la creencia de Lor'themar de que la situación aún podría ser salvada, ya era demasiado tarde.

El Cuerpo de Forestales luchó contra Arthas en todo momento, pero fueron llevados cada vez más y más atrás, hacia su capital. Sylvanas Brisaveloz fue asesinada por Arthas a las afueras de Lunargenta, la ciudad fue saqueada,[9] y los no-muertos mataron al Rey Anasterian y al todo el Concilio de Lunargenta. El mismo Lor'themar fue gravemente herido durante la caótica batalla y perdió su ojo izquierdo. Theron se abrió camino a la Isla de Quel'Danas, donde personalmente fue testigo de la corrupción de la Fuente del Sol.

Tras la muerte de Sylvanas, Lor'themar se hizo cargo del liderazgo de los elfos nobles nombrándose General y fue el responsable de la protección de Quel'Thalas frente a La Plaga antes y durante la reconstrucción de Lunargenta.

Poco después, el príncipe Kael'thas volvió de Dalaran para proclamar el renacimiento de los elfos nobles como "elfos de sangre", o sin'dorei, en honor a los caídos. Elegido Regente de Quel'Thalas, Lor'themar fue encomendado a "proteger la tierra y buscar una cura para el pueblo" mientras Kael'thas juntó un grupo de elfos de sangre para unirse a la resistencia al mando de Garithos contra La Plaga de Lordaeron. Para ayudarle en la tarea, Lor'themar eligió a Halduron Alasol, un viejo amigo.